Recientemente, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos señaló a tres instituciones financieras mexicanas por presunto lavado de dinero y vínculos con el tráfico de fentanilo y otros opioides sintéticos
Las señaladas son: CIBanco, Intercam Banco y Vector Casa de Bolsa. Esta última ha llamado especialmente la atención por su fundador: el empresario regiomontano Alfonso Romo.
El nombre de Romo se volvió tendencia en la plataforma X no solo por el escándalo financiero, sino por su relevancia política en México.
Fue jefe de la Oficina de la Presidencia durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, actuando como interlocutor con inversionistas, supervisando proyectos estratégicos y acompañando al presidente en giras nacionales e internacionales.
Su presencia en la política, sin embargo, no se limita a la 4T: en el año 2000, fue coordinador de campaña del entonces candidato panista Vicente Fox.
A raíz de este nuevo señalamiento internacional, muchas personas se preguntan quién es Alfonso Romo y cómo ha tejido su influencia tanto en el mundo empresarial como en la política mexicana
Un empresario con trayectoria y conexiones
Nacido en la Ciudad de México en 1950, Alfonso Romo Garza creció en una familia tradicional y fue educado en colegios católicos. Más tarde se mudó a Monterrey, donde se graduó como ingeniero agrónomo en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).
En los años 80 dio sus primeros pasos empresariales al adquirir la tabacalera La Moderna, y más adelante fundó Seminis, una de las mayores productoras de semillas en el mundo.
También fue presidente de Savia, dedicada al agro, así como de Grupo Plenus, con enfoque en biología sintética, y Omega, del ramo inmobiliario.
Un dato curioso que pocos conocen: representó a México como jinete ecuestre en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y Sídney 2000
De las raíces revolucionarias al círculo presidencial
Romo no llegó a la política por accidente: es descendiente directo de Francisco I. Madero, presidente de México y figura clave de la Revolución Mexicana.
Su carrera política comenzó en los 90, acercándose a figuras del PRI y del PAN en Nuevo León. Aunque en sus inicios fue crítico de AMLO, en 2011 limaron asperezas y Romo se convirtió en uno de sus principales aliados, siendo un puente con el sector empresarial durante la campaña de 2018.
Sin embargo, su presencia en el gabinete de López Obrador no estuvo exenta de polémica. En 2019, el entonces secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, renunció públicamente y mencionó a Romo como uno de los factores de su salida.
Afirmó no comprender el nivel de influencia que tenía sobre el presidente, además de señalarlo por presuntas simpatías con personajes controvertidos como Augusto Pinochet y Marcial Maciel.
También advirtió sobre el acceso diario a información económica confidencial que podría representar un conflicto de interés con su participación en Vector Casa de Bolsa
Vector responde: "No hay pruebas en nuestra contra"
Ante el señalamiento del Departamento del Tesoro, Vector Casa de Bolsa respondió que todos sus procesos son auditados tanto por autoridades financieras mexicanas como por controles internos.
Negaron cualquier vínculo con actividades ilícitas y aseguraron que, hasta el momento, no se ha presentado evidencia concreta en su contra.
La Secretaría de Hacienda de México también ha solicitado información al gobierno estadounidense para esclarecer el caso.
Este episodio vuelve a poner sobre la mesa la delgada línea entre política, negocios e intereses internacionales. Mientras tanto, Romo y su legado -tanto económico como político- se encuentran nuevamente en el ojo público