En un contexto de costos crecientes, los patrocinios empresariales se han consolidado como la fuente de ingresos más dinámica y en muchos casos vital para la operación de equipos y ligas. A escala global, consultoras especializadas reportan que los ingresos por patrocinios siguen en expansión pese a presupuestos de marketing más rígidos, con el futbol concentrando 41% de la inversión total en patrocinios deportivos, de acuerdo con el reporte global de deportes de la empresa de investigación Nielsen. Expertos del sector subrayan que las marcas ven el patrocinio como una "herramienta potente" para construir vínculo emocional y retorno de negocio, mientras los clubes lo consideran esencial para cerrar presupuestos competitivos. Esto se convierte en una alianza donde el público puede salir ganando. La supervivencia financiera de muchos clubes especialmente fuera de las élites y en ligas de desarrollo como Cibapac depende cada vez más de patrocinios robustos y medibles. La tendencia global apunta a contratos más sofisticados, activaciones digitales y venta centralizada en ciertas competiciones; en México, baloncesto, futbol y beisbol marcan la pauta con carteras de marcas en expansión y acuerdos que, bien ejecutados, pueden ser la diferencia entre competir o desaparecer. En Estados Unidos, el promedio de ingresos por patrocinio por franquicia en las cinco ligas mayores (NFL, NBA, MLB, NHL y MLS) alcanzó 51 millones de dólares en la temporada 2024?25, el doble de lo registrado hace una década, según SponsorUnited. Pero también trabajan el aspectos social.